Desde Adán y Eva hasta Steve Jobs

Todo empezó cuando la vi por primera vez, tan redonda, tan brillante, tan apetecible... Tarea difícil resistirse a esa tentación. Un día me la ofrecieron y, aunque algo escéptica, la mordí, la saboreé y ese jugo me atrapó para siempre. 

Desde entonces voy de manzana en manzana, cual pecadora original.
Escrito por Malu

8 comentarios :

  1. Desde Adán y Eva, siempre tropezando con tentadoras manzanas... ese debe ser el sino del ser humano. Genial micro, Malu, sigue pecando. ;)
    Un saludo.

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    1. Así es, pecando desde Adán y Eva. Siempre esas manzanas llamándonos a gritos.
      Gracias Mª Jesús, a seguir pecando tú también.
      Besos.
      Malu.

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  2. Ay, esas manzanas tan apetecibles, también las de Apple.
    Un saludo

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    1. Ángel, por ahí empezó la inspiración para el relato. Se me estropeó el iPhone y sólo quería otro ... después hilé con la manzana y me fui hasta Adán y Eva, lo "recoloqué" y aquí el resultado.
      Gracias por tu comentario.
      Besos.
      Malu.

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  3. ¿Quién es capaz de resistirse a una manzana tan sabrosa? Me sucede lo mismo con los buenos microrrelatos. Como este, que aúna exquisitez y buena hechura.
    Va mi 'Me gusta' y, si puedo y me dejas, un mordisco a esa manzana.
    Saludos, Malu.

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    1. Pues de tu árbol de inspiración salen unas manzanas bien sabrosas José Antonio. Mil gracias por estas palabras y, por supuesto, tienes todos los mordiscos que quieras.
      Besos.
      Malu.

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  4. ¡Cuidado! No vayas a comerte la manzana en la que vivo... Jejeje.
    ¡Genial, Malu! El microrelato, y la autora...

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    1. Jajaja, Daniel, no, no, nada de comerse al habitante de la manzana.
      Muchas gracias por tus palabras.
      Besos.
      Malu.

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