Resacas

Nunca comprendimos por qué seguía queriéndole. Con el hígado más grande que el de un ganso sobrealimentado, se aferraba como tabla de salvación a aquella farola contra la que siempre acababan sus naufragios. Ella acudía a recoger sus restos, a recomponerlos, y a devolverlos, igual que hacía siempre, a navegar.
Escrito por Juancho Plaza - Web

32 comentarios :

  1. Juancho, solo te voy a decir una cosa. Me ha encantado y me parece una obra de arte. Y no digo más para no estropearlo.
    Un abrazo.
    Pablo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Pablo, no voy a negar que me encanta que pienses así, pero creo que exageras, jajaja... de todas formas muchísimas gracias, me encanta que te guste tanto, y no creo que nada de lo que dices pueda estropear nada.
      Un fuerte abrazo!!

      Eliminar
  2. ¡Qué bueno, Juancho! Imágenes nítidas, lírica contundente. El sonido de tus palabras se mantiene después de haberlo leído.
    ¡Enhorabuena!
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Margarita, creo que tu comentario enriquece el micro.
      Besoss!!!

      Eliminar
  3. Los amores verdaderos son los que se ponen a prueba cada día y perduran, pese a toda circunstancia, más allá de la lógica.
    Fantástico, Juancho, como Pablo, no añado más.
    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Como bien dices Ángel, más allá de la lógica, es posible que subyazca cierto afán autodestructivo detrás de estás actitudes, que, creo que por desgracia, se siguen dando.
      Gracias por ser siempre tan generoso en la crítica.
      Un fuerte abrazo!!!

      Eliminar
  4. Ella, como capitán de ese barco sabe que él volverá a “navegar” en la corriente de esa “resaca”, que lo arrastra al fondo de los mares etílicos. Sólo el amor de ella se empeña en mantenerlo a flote. Juancho, muy buen relato. Narras una historia que aparenta ficticia, pero hay mucho de realidad en ésta, te dejo un me gusta.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Beto, creo que sí, que es bastante real todavía.
      Un fuerte abrazo!!!

      Eliminar
  5. El amor verdadero es un mar infinito que no entiende de razones. El problema es cuando ese amor se enmascara de compasión, porque entonces puede llegar a convertirse en un pozo del que no resulta fácil salir.
    Buen relato, Juancho, que invita a la reflexión.
    Saludos cordiales

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias Notincgas, debe resultar difícil saber que hacer en medio de la tormenta, seguro que desde fuera se ven las soluciones mucho mejor, pero hay que saber tomar esa distancia para actuar de la mejor manera.
      Un fuerte abrazo!!

      Eliminar
  6. El amor no se comprende, se siente, y tú lo has mostrado con un micro trágico y bello a la vez, Juancho. Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Matrioska, muchas veces no se puede remar en contra de esos sentimientos.
      Besoss!!

      Eliminar
  7. Buen relato Juancho. No te digo nada, porque no sería nuevo al menos en el tono de los comentarios.
    Un fuerte abrazo, amigo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Isidro, un placer encontrarte.
      Un fuerte abrazo!!!!

      Eliminar
  8. Estupendo relato, Juancho. La actitud de ella me parece tan difícil de entender como la propia condición humana. Me gustan estos personajes y estas historias incómodas, más si están contadas con tanta maestría. La última frase me parece excepcionalmente bella.
    Enhorabuena y un abrazo.
    Enrique.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Enrique, tan difícil de entender que a pesar de todo se repite demasiadas veces en la vida real. Un fuerte abrazo!!!!

      Eliminar
  9. Esta´lleno de amor, muy visual y con fuerza. Un beso

    ResponderEliminar
  10. Impecable, Juancho... Desde el título hasta el punto final. Me ha encantado!

    ResponderEliminar
  11. Al igual que el auténtico amor es un milagro, en ocasiones quien ama así espera que ese milagro obre otros milagros. Dura historia, Juancho, magistralmente contada. Enhorabuena.
    Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Fina, a veces, que persista el amor se convierte en algo sobrenatural, de difícil explicación.
      Besoss!!!

      Eliminar
  12. Seré breve... ¡Buenísimo!
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
  13. Quizás ella comprendía el porqué de esos naufragios, y lo único que podía hacer era socorrerlo en su desgracia y evitar en lo posible su autodestrucción. No sé, me imagino la historia…es muy bella, Juancho.
    Enhorabuena. Un saludo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tu lectura es muy bonita Mª de Jesús y le da a la historia un toque de esperanza y, por qué no, tal vez algún día, consiga que llegue a puerto. Muchas gracias por comentar.
      Besosss!!!

      Eliminar
  14. La ama con sus bondades y sus miserias, y él se aferra a ese amor como salvavidas a su locura. Juancho, buenísimo. un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Muchas gracias Salvador, encantado de verte por aquí. Un fuerte abrazo!!!

      Eliminar
  15. La verdad es que resulta difícil entender por qué le sigue queriendo, pero el amor es así. La historia es preciosa, tan bonita como triste. Me inclino por la vertiente que ha abierto Mª Jesús, que sólo ella sabe la razón de esos naufragios y quizá por eso le salva una y otra vez.
    Lo peor de todo esto es que es tan real como la vida misma, cuántos naufragios y cuántas resacas ...
    Un beso Juancho, me ha encantado.
    Malu.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Tienes razón Malu, una historia que quizás se repita demasiado. Muchas gracias por la visita, por la lectura, por el comentario...
      Besossss!!!

      Eliminar
  16. ¡Magnífico relato, Juancho!
    Me ha encantado el uso que haces de un vocabulario muy marinero (tabla de salvación, naufragio, restos, navegar y, por supuesto, resaca) para expresar una situación humana límite, junto a la que, como suele ser habitual, hay siempre alguien que acude en ayuda.
    Va mi "Me gusta", muy merecido, y mis aplausos por tan espléndida historia de relaciones humanas.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Me alegro de que guste, José Antonio. Gracias por la visita, por la lectura, por tus palabras, por todo. Un fuerte abrazo!!!

      Eliminar

Si no tienes cuenta, elige "Nombre/URL" en lugar de "Anónimo". ¡Gracias!