Orgullo y prejuicios
El sargento de la Guardia Suiza caminaba cabizbajo bajo la columnata. Se sentía abochornado cada vez que aparecía en público con ese estúpido uniforme. Decidido, dimitiría y se buscaría un trabajo donde no se sintiera como un tuno en el Día del Orgullo Gay. De ayudante de mago, tal vez...
Juas, desde el título hasta el final del relato me parece un micro con muchas lecturas y mucha miga. El título es genial. Ese orgullo y, sobre todo, esos prejuicios. Le hubiera gustado hasta a Jane Austen.
ResponderEliminarUn saludo.
Pablo
Una pregunta. ¿El guardia es algo xenófobo con los gays? Es que me entre la duda con la última frase del orgullo hay. Ya dije que veo varias lecturas en el micro.
EliminarSaludos.
Pablo.
También podría actuar como Clopin, personaje de "El jorobado de Nôtre Dame" (versión Disney, http://schoolofdisney.com/Stories/HunchbackofNotreDame/clipart/clopin.gif), que siempre me ha recordado, precisamente, ese extraño uniforme de la Guardia Suiza. Mucho diseño de Miguel Ángel (Buonarroti) y todo lo que se quiera, pero comprendo al sargento y le deseo éxito profesional allá donde termine.
ResponderEliminarVa mi "Me gusta", aunque no sea Jane Austen ( ;) ).
También te mando un cálido saludo, Juas.
Hola, Juas. Vamos a tener que trabajar con esa autoestima... ¿Ayudante de mago? Este microrrelato no se merece menos que plaza de mago titular. ¿Lo has leído? Pues hala, a desfilar con la cabeza bien alta.
ResponderEliminar(Así, por lo bajini, ¿eres el mismo juas de la Cuenta 140?)
Pobre guardia suizo, esperemos que no le vea ningún amigo vestido de esa guisa. Siempre puede cambiar de trabajo...eso sí, quedándose con el uniforme y hacerle unos arreglitos para el próximo desfile del Orgullo Gay. Causaría sensación.
ResponderEliminarMe ha gustado, Juas. Un saludo.
Pues no lo entiendo, la verdad, al uniforme no le falta detalle y tiene unos colores bien alegres, pero, en fin, sobre gustos no hay nada escrito.
ResponderEliminarLo que sí tengo claro es que tu relato me ha encantado, Juas, diga lo que diga tu sargento.
Un saludo
Pues ya es raro, porque mira que van todo tiesos y dignos ellos con sus coloridos uniformes. A mí me da que tu sargento no se siente muy orgulloso por culpa de algún que otro prejuicio. Ya nos contarás, Juas. Un saludo.
ResponderEliminarHola, Juas, ojalá tu sargento cambie de opinión, y no se decante por lo de mago, lo bien que quedaría subidito a una carroza vestida con colores tan vistosos como su uniforme... a ver, a ver...
ResponderEliminarUn saludo