Punto de inflexión

Amanecía, los homínidos vagaban a cuatro patas, buscaban alimento, se reproducían, en un paraje inhóspito sobrevivían. De repente, uno de ellos se irguió y observó el amanecer, pero no como el tránsito de la noche al día. Un atisbo de gozo se reflejó en su rostro. Ese día todo cambió.
Escrito por Salvador Esteve

7 comentarios :

  1. Sin duda alguna se trata del primer hito en la evolución "humana", cuando un animal lejanamente parecido a nosotros decide erguirse y aprender a moverse dominando su nuevo centro de gravedad. Enhorabuena, Salvador, hasta de la Prehistoria se sacan buenas historias. Un saludo.

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    1. Mª Jesús, muchas gracias por tus palabras. Abrazos.

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  2. Qué gusto leerte también por aquí, Salvador. En el momento en que el homínido sabe apreciar un buen amanecer es cuando comienza a humanizarse.
    Estoy a punto de "cerrar" unas semanas por vacaciones, pero te he visto y no he podido por menos que hacerte una visita.
    Un abrazo

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  3. Desde entonces ese ha monopolizado el caminar erguido, mirado a los demás desde arriba e intentando que los demás sigamos moviéndonos a cuatro patas. Buena introducción Salvador, es bueno verte por aquí.
    Saludos.

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    1. Ángel, Beto, muchas gracias por vuestro recibimiento. Leí en el blog de Lorenzo un tweet de este concurso, y al leer nombres de amig@s no lo dudé, reuní cincuenta palabras. Abrazos y feliz verano.

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  4. Me ha gustado mucho tu "reto" de cincuenta palabras.
    Suerte

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    1. María Jesús, muchas gracias por tu comentario. Abrazos.

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