La respuesta de mi madre

¿Somos el llanto de Dios o el escupitajo del Diablo?, le pregunté a mi madre, que solía asistir a misa todos los domingos. Después de largo rato, contestó: los muertos nunca hemos tenido voz ni voto en ese diálogo de sordos. Seguí acariciando a mis gusanos y ella siguió rezando.
Escrito por Andrés Galindo - Web

No hay comentarios :

Si no tienes cuenta, elige "Nombre/URL" en lugar de "Anónimo". ¡Gracias!