Serespositivos

La carta resbaló de entre sus dedos. Miró a su mujer. La abrazó y balbuceó: 

—¿Por qué te cambié el turno en el hospital? Me hubiera tenido que pinchar yo con aquella maldita jeringuilla.

Ella le tranquilizó.

—La ciencia avanza cada día más, mi amor. Ahora hay que ser positivos.
Escrito por Stbn

5 comentarios :

  1. Comprensibles los sentimientos de culpa de él, admirable la actitud de ella. El juego de palabras del título, la sencillez y rotundidad del texto, se combinan para sortear inútiles lamentaciones y mantener la esperanza.
    Un saludo

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  2. Gracias por tus comentarios Ángel, soy gran admirador tuyo
    Stbn

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  3. Me gusta el juego de palabras que utiliza en este relato, un micro inteligente, muy bueno. Suerte.
    Saludos.

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