Confusión
La línea que separaba su realidad de la fantasía era muy tenue, apenas perceptible. El hombre, empeñado en demostrar que aquello que vivía no era producto de su imaginación, jugaba a adivinar dónde se producía ese cambio, casi invisible. Pero su mujer, mucho más práctica, le daba un nombre: esquizofrenia.
La esquizofrenia afecta al pensamiento, la percepción, las emociones. Hay algunos enfermos que están en su mundo, que su fantasía no es muy mala para ellos y no distinguen. Lo malo es cuando afecta a la conducta.
ResponderEliminarMuy bien descrito, Gloria.
Me alegro que te haya gustado. La verdad es una enfermedad terrible y a veces lo sufre más la familia que el propio afectado. Un abrazo de Gloria
EliminarMuchos vivimos realidades diferentes, ciertas o no, pero a unos nos llaman locos y a otros no, es tan difícil saber que pasa por el interior de ciertas cabezas.
ResponderEliminarBuen relato Gloria.
Saludos.
Muchas veces depende de quién sea el que te juzga. Pero sabes que te digo, viva el diferente ya que interpreta el mundo a su manera, y muchas veces esta reimpretación es más sabia. Un beso. Gloria
EliminarVaya, Gloria. Me parece un magnífico relato con un final contundente. Y un buen título.
ResponderEliminarMe ha gustado.
Pablo.
Muchas gracias Pablo. Consideró que en esa confusión está esa diferencia entre la normalidad y la denominada " locura". Gracias por tus palabras. Un saludo de Gloria
Eliminar¡Vaya, Gloria! Con cincuenta palabras (donde incluyo la del título) me has tenido confundido totalmente. Solo con la última palabra me has clarificado el sentido de tu microrrelato.
ResponderEliminarMuy bien llevado desde el principio hasta el final.
Va mi me gusta y un saludo muy cordial.
Muchas gracias José Antonio. La verdad en esta ocasión cuando empecé a escribir no lo tenía demasiado claro, pero el mismo texto me indicó el camino a seguir. Besos de Gloria
EliminarQué bella resulta la confusión entre fantasía y realidad en el terreno literario,como muy bien demuestras, Gloria. Qué magníficas obras se han escrito con este tema -"El Quijote", sin ir más lejos-. Y qué terrible resulta la enfermedad en la vida real, tanto para el pretendidamente fantasioso como para los realistas familiares.
ResponderEliminarEnhorabuena, Gloria. Un abrazo enorme.
Muchas gracias por tus amables palabras. Tienes mucha razón. Quizás sea porque el que la sufre no es consciente de su diferencia y de lo que esta supone, al contrario que su familia. Un beso de Gloria Arcos
EliminarSi hemos de ser sensatos y racionales, estamos obligados a separar la realidad tangible de la imaginación y las ensoñaciones varias. Aunque a la vista del mundo que nos toca vivir (o sufrir), quizá el aderezo de la fantasía sirva de ayuda para sobrellevar tanta penuria. Es más, Gloria, me atrevo a decir que por ese motivo leemos y escribimos.
ResponderEliminarUn abrazo
Tienes mucha razón.
ResponderEliminarLa escritura nos permite lanzarnos y acudir a la fantasía en momentos en los que la necesitamos.
Por eso nos aferramos a ella como a un clavo ardiendo, y lo hacemos sin que nos miren como a locos o bichos raros.
Un saludo afectuoso de Gloria.
La línea que separa la realidad de la fantasía, el sueño de la vigilia, la cordura de la locura y otras tantas fronteras del ser, es muy fina, apenas perceptible, a veces imaginaria, como la del ecuador y los meridianos. Y la enfermedad mental es un continente demasiado extenso como para intentar decir algo en un par de frases.
ResponderEliminarSólo añadir que la mujer se muestra muy segura y pragmática y quizá peque de soberbia e incomprensión.
Para acabar, diré que el microrrelato me ha sabido a gloria. Mis saludos a la autora.
Muchas gracias Enrique. La verdad es que la enfermedad mental es un tema muy espinoso. Gracias por tus comentarios. Un abrazo. Gloria
EliminarBuena aproximación al tema, Gloria, con esa contraposición entre el "juego" y la visión pragmática de la (sufrida, imagino)esposa.
ResponderEliminarComo siempre, todo depende de la mirada que le demos a las cosas.
Besos
Sí, la contraposición es enorme, aunque como tú dices, la esposa que es consciente de la enfermedad que sufre su marido se da cuenta de ello. Muchas gracias, Carles por tus palabras.Un saludo de Gloria
ResponderEliminarMe ha recordado a la película Una mente maravillosa. Y me deja esa misma sensación, algo descorazonadora, del acercamiento a una mente tan especial. Me ha gustado, Gloria, tanto el tema como tu modo de contarlo.
ResponderEliminarUn abrazo.
Muchas gracias por tus palabras. Me animan a continuar escribiendo. El tema elegido este mes como dices es descorazonador, y sí, posiblemente se pueda enlazar con esa preciosa película.
ResponderEliminarNo sé porqué los micros de temas tristes, sociales o de enfermedades suelen ser los que más juego dan.
Un saludo.
Los pacientes que sufren esta terrible enfermedad intentan controlar y distinguir lo que es real y lo que sólo ocurre en su mente. Coincido con Enrique que me ha recordado a esa película en la que pude comprender cómo lo vive el enfermo y la familia.
ResponderEliminarGloria, me ha gustado mucho cómo lo has afrontado el tema.
Enhorabuena!
Besos.
Muchas gracias Pilar. Afortunadamente no he tenido a nadie cercano que sufriese esta enfermedad. Debe ser horrible tanto para el enfermo, que muchas veces no es consciente de ello, como la familia que lo sufre el doble.
EliminarMe alegro que te haya gustado. Gracias por tus amables palabras. Un beso de Gloria
Un terrible trastorno que hace sufrir tanto a los que lo padecen como a las personas de su entorno, porque todos están igual de perdidos. Muy buen micro, Gloria. Un beso y enhorabuena por esos veinte relatazos ya.
ResponderEliminarGracias, aunque me queda mucho para alcanzar tu nivel y el de otros grandes que pululan por esta página y que siempre os lleváis el gato al agua.
EliminarEspero que se me pegue algo y que podamos volver a coincidir para hablar de nuevo. Un fuerte abrazo de Gloria.
Creo que todos tenemos una línea "sobre nuestras cabezas". Lo ideal sería que el trayecto para traspasarla fuera voluntario y de ida y vuelta; lamentablemente no es así para todos.
ResponderEliminarUn saludo, Gloria.
Sí y cuando la traspasamos es difícil regresar y volver a la "normalidad".
ResponderEliminarPor eso, espero que no tengamos que llegar nunca a traspasarla.
Recibe un fuerte abrazo de Gloria