Las señoritas de la calle de Avinyó

Cuando abrió la ventana, descubrió incrédulo cómo el mundo aparecía roto, hecho añicos. El sol se le presentaba fragmentado, cual vidriera catedralicia. A la luna, por la noche, le pasaba algo idéntico. 

Pablo acudió, excitado, a su estudio para reflejar en un lienzo el que ya sería su nuevo mirar.
Escrito por José Antonio Barrionuevo - Twitter

17 comentarios :

  1. Qué bien explicas la nueva mirada del pintor ante un mundo diferente. Cuando la literatura y la pintura se hermanan, relatos como el tuyo nos emocionan. Saludos.

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  2. Me ha encantado tu relato, paisano. Ahora entiendo como nació el cubismo.
    Ingenioso e i,aginativo. Da gusto leerlo.
    Buenísimo.
    Un abrazo.
    Pablo

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    1. Carmelo Carrascal7/11/17, 17:37

      José Antonio, enhorabuena. Tu micro me parece brillante.
      Da qué pensar. Por ejemplo, en mi caso, a bote pronto:

      - La desintegración de la visión humana del mundo, que no de la realidad como tal.
      - Lo fragmentario esconde muchas preguntas y demanda implicarse en su interpretación.
      - La realidad precisa ser recompuesta con la mirada, la realidad que el artista refleja así, dislocada.
      - El espactador, de pronto, convertido en artista: artista de una novísima manera, revolucionaria, de mirar...
      - Y, a su vez, mirar: una forma diferente de vivir.

      Saludos!

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  3. Si Carmen nos brindó, el mes pasado, un relato lleno de arte, en torno a "El nacimiento de Venus", estas "Señoritas de Aviñón" no lo son menos, con todo lo que de rompedor tiene este lienzo en la historia de la pintura. Los artistas auténticos, con su sensibilidad especial, son los primeros en detectar los cambios en la realidad. Lo del "mundo hecho añicos" no era casual, el arte siempre es hijo de su tiempo. Tú lo has reflejado muy bien en este buen relato, José Antonio.
    Un abrazo

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  4. José Antonio, presentas un bello homenaje a Picasso, con tus letras nos haces ver su forma de pintar.
    Buen relato.
    Un abrazo.

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  5. Saber mirar con ojos nuevos es empresa del artista y de la persona que pretende hacer su propio camino y disfrutar del proceso. La realidad está conformada por múltiples realidades y cada ojo nuevo que sabe mirar, descubre una de ellas. El artista la plasma, y el mortal común, se ve inducido a un intenso y revelador presente.
    Tu micro, José Antonio, no solo ha sabido contarnos, sino hacernos ver un mundo nuevo a través de tu mirada y hacer un homenaje al inmenso Picasso. Un abrazo

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  6. Una mirada genuina, auténtica. Me parece un relato magnifico. Esas señoritas tan azules, tan cúbicas. Tú José Antonio lo has enmarcado.
    Muy bueno
    Besicos

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  7. A través de tus cincuenta palabras asistimos al nacimiento del cubismo. La mirada que Picasso proyecta en el lienzo es una nueva visión de la realidad. Las mujeres retratadas aparecen simultáneamente desde distintas perspectivas. No existe una mirada única, sino múltiple, fragmentada.
    Un excelente micro, José Antonio. Un fuerte abrazo.

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  8. Qué bien describes la sensación que quizá le impulsó a interpretar los fragmentos que la luz expone y a recomponerlos bajo el tamiz personal de un cerebro caleidoscópico.
    No basta con una forma diferente de mirar, hay que saber transmitirla y parece que lo consiguió, aunque reconozco que a mí, ese nuevo mirar no me cala demasiado.
    Un relato muy sugerente, José Antonio. Enhorabuena.
    Un abrazo.

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  9. Semejante revelación conduce a ese estado posterior de excitación que tan bien describes, decisivo momento en la visa de cualquier artista, y que en el caso de Picasso tuvo una trascendencia universal.
    Estupendo relato, José Antonio, que arranca con ese momento tan mágico y nos deja en el de la euforia del pintor, otorgándonos el privilegio de empatizar con él en tan extraordinario acontecimiento personal.
    Un abrazo y mi mas sincera enhorabuena.

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    1. Si falta alguna tilde por ahí no pienses que se debe a una mirada diferente por mí parte sobre la gramática, ;-).

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  10. Muy imaginativo tu relato sobre la base del famoso cuadro que (junto con otros) daría pie y consistencia al expresionismo caracterizado por la importancia al concepto y no a la percepción.
    Relato de los que me gustan.
    Un fuerte abrazo, amigo Barrio.

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  11. Has hecho una visión Picassiana, de lo que el artista debió sentir, cuando comenzó a fragmentar el mundo, con su mirada.
    Seguro que si estuviera vivo, te aplaudiría, como yo lo estoy haciendo.
    Suerte y un abrazo virtual, José Antonio

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  12. Ya me gustaría a mí tener una mala noche así y descubrir por la mañana una nueva manera de ver el mundo.
    Un buen micro. Saludos, José Antonio

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  13. Muy original tu forma de contar cómo pudo ser aquel momento mágico en el que Picasso cambió su punto de vista del mundo, plasmándolo después con imágenes geométricas que fueron el inicio del cubismo. Me ha encantado, José Antonio. Un abrazo.

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  14. A lo largo de la historia, muchos artistas, literatos, científicos y genios de todo pelaje han tenido lo que se llama una epifanía. Muchas de ellas habrán sido desdeñables, o hasta aberraciones, pero otras han cambiado la forma de ver el mundo del resto de los mortales.
    En el caso del cubismo no cabe duda de que fue así, de que en la época de las vanguardias y los ismos fue la propuesta más rupturista de todas.
    Y también pudo ser así, como lo cuentas en estas magníficas Cincuenta palabras, la forma en que Picasso se internó en el cubismo, en que la composición del cuadro se le hizo añicos, como si ese mundo bidimensional del lienzo hubiese emprendido una revolución para convertirse en tridimensional, o multidimensional.
    Y ahí están esas señoritas de vida alegre, que se diría eufemísticamente, de la calle Avinyó de Barcelona, en la que Picasso incluyó también esas máscaras africanas que tanto le habían influenciado, y yo hasta quiero ver un adelanto del retrato de Gertrude Stein en una de esas señoritas, como si, años después, retirada del burdel, se hubiese convertido en una señora respetable, literata y mecenas de artistas.
    Muy buen relato, José Antonio, un abrazo.

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  15. No sé si es que Picasso se levantó con resaca y de ahí salió su maravillosa obra... ja, ja, ja... Bromas aparte, querido José Antonio, tengo que decir que te ha quedado un relato muy artístico.
    Enhorabuena, un beso.
    Malu.

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