La vida en un hilo

Por un momento pensé que tenía vida.

Los aplausos, las risas y las lágrimas. La gente pasa y me mira con alegría, se queda a mi lado mirando fijamente todo el acto.

Todo termina y comienza cuando los hilos los deja de mover el titiritero.

La vida es un sueño.
Escrito por Ricardo Rodríguez Sánchez

10 comentarios :

  1. Muy buen relato Ricardo, me ha gustado mucho. Igual somos también simples muñecos movidos por un titiritero y nuestra vida también es un sueño...

    Enhorabuena por esas 50 palabras.

    Un saludo.

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  2. Gracias por tu comentario.

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  3. ¿Sueñan los títeres? Tal vez seamos nosotros los que caemos dormidos cuando ellos se pliegan sobre sus cuerdas.
    Precioso micro, Ricardo.

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    1. Muchas gracias. Mayor el agradecimiento porqué proviene de una creadora de fantasías y sueños.

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  4. La penúltima frase podría ser aplicable a toda existencia, a ese creernos dueños de un destino, cuando solo estamos de paso, en manos de no se sabe quién o qué, con fecha de caducidad, viviendo una obra de la que solo habrá una representación.
    Hermoso relato, con hondo contenido.
    Un saludo. Ricardo

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    1. Muchas gracias. En este teatro de cincuenta palabras que tiene grandes representaciones.

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  5. Todos somos muñecos, movidos por hilos invisible que nos da vida hasta que el cordón se rompe.
    Me gusta como lo has expuesto.
    Saludos

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    1. Gracias por hilar mis palabras y dar una conexión en tu lectura.

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  6. Original, interesante y buen micro. Los ecos de Neville (en el título) y de Calderón (en el texto) sencillamente estupendos a mi juicio.
    Cordial saludo

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    1. Gracias por tu lectura y tus palabras.

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