Lo que no te dijo

Tras su muerte descubrimos un armario lleno de regalos sin entregar. Lazos rojos, azules y amarillos llenaban los estantes. Envueltos en filigrana: relojes, estilográficas, libros de poemas y bufandas y pañuelos. Una rosa marchita endulzaba el aire con su aroma a podredumbre.

Te quiso siempre, y nunca olvidó tu cumpleaños.
Escrito por Manu Ramírez

11 comentarios :

  1. Hola, Manu.
    Muy buen relato, hermoso y triste. Hay amores que, aunque jamás salgan a la luz, son tan fuertes que son capaces de durar toda una vida.
    Saludos.

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  2. Has conseguido que hasta esa rosa marchita resulte hermosa. Triste y poético relato, Manu, con la belleza de la sencillez.
    Muy bonito.

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  3. Nada hay más triste y frustrante que no decir lo que se tenía que haber dicho y no hacer lo que tendría que haberse hecho, aun a riesgo de equivocarse. Cuanto más lleno esté ese armario más consumirá el vacío a esa persona. Dicen que nunca es tarde, pero sí, a veces si lo es, como bien refleja tu relato.
    Un saludo

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  4. Pues tú no has dejado nada por decir, Manu: regalos de alegres colores que languidecen y agonizan en una estantería gris; y esa rosa que murió antes de ser depositada en una lápida.
    Dulcemente sobrecogedor.
    Un saludo

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  5. En demasiadas ocasiones decimos palabras que no deberíamos decir, pero es muchísimo peor no decir aquellas que nos dicta el corazón. Triste historia, precioso micro. Felicidades, Manu.
    Un saludo.

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  6. Quizás con cada regalo que compró dijo: "este sí que se lo daré", y luego el miedo al rechazo fue llenando su alma y su armario,
    Hermoso relato, Manu.
    Un beso.

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  7. Precioso micro, Manu. Imagino todos esos regalos envueltos y sin entregar, que me hacen pensar también en todas esas frases expresando cariño hacia la otra persona, que no llegaron a decirse. No se especifica quien era el destinatario de los regalos, ni la persona que los compró. Mejor así, nos permite imaginarlo a nosotros mismos. Creo que todos tenemos algún ejemplo cercano.
    Un abrazo.

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  8. Qué micro más triste, Manu. Está delicadamente escrito pero es desolador. Me ha gustado mucho. Felicidades y un saludo.

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  9. Qué penita. Cómo canta (o cantaba, mejor dicho) Sabina, me pregunto dónde van los besos que no damos.
    Saludos cordiales, Manu.

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  10. ¿Qué triste historia guardará ese armario junto a los regalos?
    Supongo que la vida a veces no da opción a decirlo todo.
    Saludos.
    Carme.

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  11. Manuel, me ha encantado tu micro, tan romántico y emotivo.
    Saludos

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