La última vez

Muchos y temerarios fueron los lugares elegidos para dar rienda suelta a su pasión clandestina. Siempre decían que sería la última vez, pero hoy, detrás del sofá, ese pronóstico podría cumplirse. Ajeno aún a lo que sucedía a su espalda, el marido celoso y violento contemplaba el partido de fútbol.
Escrito por Ángel Saiz Mora

65 comentarios :

  1. Ángel, pues más vale que el partido esté entretenido y marquen muchos goles, porque a él le están metiendo uno por toda la escuadra y en fuera de juego. Y no quiero pensar que pasará si se entera, ya que con lo de celoso y violento lo has dicho todo. Y desde luego los amantes temerarios son un rato.
    Muy bue relato, me ha gustado mucho.
    Un saludo y un abrazo Ángel.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Hay gente que no sólo no se conforma con transgredir un acuerdo de fidelidad para dar rienda suelta a su pasión, sino que también han de añadir riesgo y adrenalina para que la emoción sea completa. La violencia machista o de cualquier tipo nunca está justificada, aunque en este caso va a ser difícil que no se produzca.
      Muchas gracias por tu comentario Javier.
      Un abrazo

      Eliminar
  2. Dice el poeta Ángel González en su "Inventario de lugares propicios al amor" que estos son pocos. No conocía la temeridad de los amantes de tu relato. Aun así, deseo que el marido no los descubra para no asistir a un final trágico.
    Con el alma en vilo te doy la enhorabuena, Ángel. Y un gran abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si les encuentra va a ser un problema, pero si no lo hace, buscarán un nuevo lugar para sus actividades conjuntas. Viene a ser como un juego de la ruleta rusa, en el que antes o después perderán.
      Gracias por tu amable comentario, Carmen.
      Un abrazo

      Eliminar
  3. Parece que su temeridad va a fracasar nuevamente. Porque parecer, parece que quieren ser descubiertos y contra el fútbol creo que no se puede hacer nada... Mejor pedir el divorcio por la vía tradicional.
    ¡Feliz Navidad, Ángel!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para algunos el deporte rey es lo primero, una auténtica venda en los ojos que les impide ver la realidad más evidente. Si en lugar de un partido se tratase de un tedioso debate político, estaríamos más cerca de un posible escenario de crimen pasional.
      Abrazos y feliz Navidad también para ti

      Eliminar
  4. Creo que esta vez los amantes han arriesgado un poco demasiado. Supongo que el aumento del riesgo va en concordancia con el aumento de pasión. Igual, si el equipo ganador resulta el del marido, todavía queda alguna esperanza de acabar brindando los tres juntos. Todo es cuestión de prioridades. Muy bueno, Ángel. Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El fútbol también levanta muchas pasiones, por tanto, lo que planteas podría ser posible; llevado por la euforia ante la victoria de su equipo, el marido aceptaría cualquier explicación o no querría asimilar la evidencia, cosas más raras se han visto. Otra cosa será cuando, enfriada la primera euforia, recapacite un poco.
      Gracias Juana. Un abrazo y feliz Navidad

      Eliminar
  5. Eso sí es vivir peligrosamente, vaya par de osados. Qué genialmente lo has contado, Ángel. Me alegro mucho de leerte y de que estés teniendo tantos éxitos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y yo me alegro de esos viajes tan buenos que haces y de que compartas tus letras. En cuando a éxitos, mira quien fue a hablar.
      Un abrazo, Belén. Que seas muy feliz estos días que se acercan y todos los que vengan después.

      Eliminar
  6. Yo creo que todo depende de cómo vaya el partido de fútbol, si está muy aburrido puede que al marido le dé por levantarse para ir al frigo a por una cerveza y les pille en plena faena a los temerarios amantes que, por otro lado, ya son ganas de complicarse la vida. No recuerdo en cuál de sus películas trató este tema Woody Allen, me vienen a la cabeza un par de escenas: una en una tienda de muebles dentro de un armario y la otra en un restaurante debajo de la mesa. En ambos casos, el único peligro para los retorcidos amantes era ser pescados in fraganti, pero supongo que lo de la vergüenza lo tenían más que superado. Aunque, si no recuerdo mal, el personaje que hacía Woody Allen, creo que se dejaba llevar por las fantasías de su volcánica conquista. Buen micro, Ángel, como todo lo que escribes. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Habrá que desear que el desarrollo del partido sea satisfactorio, y evitar así males mayores, que por otra parte se habrían buscado con tanta temeridad. No recuerdo esas escenas concretas de Woody Allen, pero no me importaría que se me pegase un poquito de su genialidad.
      Te veo en plena forma y me alegro por ello, al tiempo que te envío mis mejores deseos para que comiences el nuevo año como lo terminas: lleno de actividad, buenas ideas y mejor humor.
      Un abrazo, Enrique

      Eliminar
    2. Gracias por esos deseos, Ángel, esperemos que las buenas ideas y las actividades perduren y que no nos entre ningún virus en el disco duro, tampoco en el blando que, supongo, será el resto del cuerpo. En cuanto a Woody Allen, creo que su creatividad es de envidiar, pues lleva años manteniendo un nivel en sus películas que, a mi entender, va del aprobado alto al sobresaliente. Aprovecho para expresarte también mis mejores deseos. Abrazos.

      Eliminar
  7. Parece que el riesgo les pone más que la misma aventura en sí. Quizás ser descubiertos es lo que les crea esa dosis de adrenalina que necesitan para consumar su clandestina lujuria.
    como siempre lo has contado con una gran naturalidad y maestría, haciéndonos sentir esa presión y esa angustia por si son descubiertos por tal violento esposo.
    genial, genial...
    Un beso Ángel.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se entiende que su pasión particular ya se les quedaba corta, de aquí que precisen incrementarla convirtiéndola en una jugada de riesgo. Hay gente para todo.
      Para ejemplo de maestría la que tu derrochas constantemente.
      Agradezco mucho tus palabras y te envío un abrazo prenavideño

      Eliminar
  8. Ups! Concuerdo con los anteriores comentarios, me da que este par de adúlteros están buscando emociones fuertes para avivar la llama de su lascivia.
    Muy divertido, Ángel, casi he podido imaginar a José Mota en el papel del marido 'astado'.
    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Que buscan emociones fuertes parece evidente, lo que no está tan claro es que hayan pensado en las consecuencias. La escena puede interpretarse igualmente de forma dramática o cómica, me alegro de que tu visión se haya centrado en la comicidad, demasiadas penas y enfrentamientos tiene ya la vida.
      Muchas gracias, Vicente. Felices fiestas y un abrazo fuerte

      Eliminar
  9. Parece que nuestros descontrolados amantes han decidido llevar al límite su 'deporte' de riesgo y disfrutar de la erótica del peligro que debe ser más poderosa cuando, como en este caso, se mezclan las revoltosas hormonas sexuales con la adrenalina.
    Quizás sea su última vez si el cornúpeto forofo les pilla, pero, sinceramente, no se me ocurre cosa mejor que estar haciendo cuando la muerte aparezca.

    Es un relato muy complicado de contar, y lo has resuelto de una forma magistral, Ángel. Felicidades, maestro.

    Un abrazo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Se trata de una pareja que ha asumido el alto riesgo que podría conllevar ser descubiertos, hasta el punto de que pagarían gustosos ese precio si ello supone irse de la manera que han elegido; creo que soy de tu opinión, si hay que despedirse de la vida, que sea con estilo.
      Muchas gracias por tu comentario, Antonio, como siempre, una joya en sí mismo. Un abrazo fuerte y felices fiestas

      Eliminar
  10. La pasión que se nutre de adrenalina tiene visos de ser efímera. Solo una victoria contundente del equipo del marido puede hacer que la historia no acabe trágicamente. Original, divertido y furtivo relato, Ángel. Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Habrá que desear que el equipo del marido esté acertado esa noche y gane por goleada. Como bien dices, parece que solo eso podría salvarles, o al menos atenuar una tragedia que parece anunciada y hasta buscada.
      Muchas gracias, Salvador. Que pases los días que se acercan de la mejor forma posible.
      Un abrazo

      Eliminar
  11. ¡Vaya, qué bien utilizas la ironía! Amigo Ángel, "que no sea la última vez, eso espero. Buen cincuenta
    Besicos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si de mí depende seguiré dando toda la guerra que pueda con las letras, aparte de seguir leyendo gustoso las tuyas.
      Un abrazo, Carmen. Que pases buenas fiestas, Carmen, bien acompañada por los tuyos y por la brisa marina.
      Abrazos

      Eliminar
  12. Salvador Pérez Salas15/12/15, 22:30

    Creo que esta vez es la última. Se va a cumplir lo que vaticina tu título: será la última vez. Lo veo en ese ... "Ajeno aún...". Ese aún... parece presagiar que dejará de estar ajeno. o sea, que los coge. ¡Pobre marido, si su equipo pierde! Y, pobre... si gana. ¿Cómo pasará de la euforia del triunfo de su equipo a la escena que se encuentra?
    Ángel... nos diviertes y, como ves, nos haces darle vueltas a tu historia. Enhorabuena, MAESTRO.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Nadie sabe cómo va a reaccionar ante una situación extrema, pero como bien apuntas, va a ser difícil que esto termine bien y todos coman perdices al final, incluso aunque el equipo del marido, que no parece muy comprensivo, gane por goleada.
      Si estas cincuenta palabras te han divertido ya me doy por contento.
      Mil gracias, Salvador, un abrazo y no dejes de ser feliz los días que se acercan y todos los demás.

      Eliminar
  13. El engaño y el sexo furtivo también pueden llegar a ser alcanzados por la rutina.
    Parece que a estos amantes les atrae más el riesgo a ser descubiertos que el propio acto.
    Gran micro, Ángel. Una escena con una gran tensión latente y que no parece que vaya a acabar bien.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Dicen que de todo nos cansamos, que las relaciones hay que mantenerlas vivas con nuevas aportaciones a lo largo del tiempo para que no se enfríen. Esa tensión que mencionas hace ver que al menos han conseguido imprimir algo de emoción a sus vidas. Otra cosa es cómo termine este jugar con fuego, que más parece un incendio del que difícilmente podrán escapar.
      Gracias por tu comentario, José.
      También te hago llegar mis saludos junto a mis mejores deseos.

      Eliminar
  14. Has dejado la historia en el punto en que de un momento a otro se oirá aquello de:... ¡Esto no es lo que parece! No por favor no lo hagas! ¡Por la ventana no, que está desnudo, es un quinto piso y hace frío"... y tal.
    Muy buen relato Angel. Enhorabuena maestro. Me gusta leerte.
    Un abrazo gordo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Pues no te digo que no, gustoso incorporaría este diálogo que aportas, con lo que se convertiría en un relato a dos manos, todo con mucho humor para suavizar el drama, que así se vestiría de tragicomedia, pero el formato de nuestra querida página tiene sus normas que gustosos respetamos, y que en este caso dejan el final un poco abierto, que también puede valer.
      Ya sabes que yo también te leo encantado, Isidro, aparte del gustazo que supone coincidir contigo en persona.
      Otro abrazo igual de gordo

      Eliminar
  15. Muy bueno Ángel. Uffff nos hemos quedado en vilo Jejeje. Besitos y Enhorabuena

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. El caso es que las letras, de una forma o de otra, no dejen indiferente. Me alegro de que te haya gustado, te mando un abrazo y te deseo buenas fiestas.

      Eliminar
  16. Angel, nos has dejado con el corazón encogido. A algunas parejas les pone correr el riesgo de ser descubiertos, pero la tuya es demasiado atrevida. Espero que la historia acabe bien. Enhorabuena Angel! Besos

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Estos dos no se han conformado con la clandestinidad y el riesgo, han querido ir un paso más allá. Seguro que han logrado el objetivo de generar más adrenalina en sus cuerpos, lo que no está tan claro es el final de la historia, aunque eso ya no depende de ellos, sino del marido, y hasta del resultado del partido.
      Gracias, Pilar. Felices fiestas y besos también para ti

      Eliminar
  17. Ay, ay, ay, demasiados nervios me produce tu micro. Están a punto de ser descubiertos y no quiero pensar lo que pasará...
    Me ha encantado, Ángel.
    Un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Precisamente mi humilde intención fue que estos amantes clandestinos produjeran temor ajeno en el lector ante lo que pudiera sucederles. Lo que ocurra a partir de ahora ya dependerá de los propios personajes, dado que, como bien sabes, cuando los dejamos marchar dejan de ser nuestros y adquieren una vida propia.
      Muchas gracias, Sandra. Un beso y felices fiestas

      Eliminar
  18. Me da que esta vez el fútbol va a quedar relegado a un segundo plano. Una historia arriesgada contada con mucho acierto. Enhorabuena, Ángel.
    Un abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Creo que el calificativo de "arriesgada" le sienta como un guante a esta historia, pues es el riesgo el que alimenta los deseos de los amantes y el que late de principio a fin del texto.
      Muchas gracias, Fina. Felices fiestas y un abrazo

      Eliminar
  19. La osadía no tiene límites, está visto, pero me temo que va a durar la fiesta... lo que dure el partido.
    Original y simpático tu micro, Ángel, a falta de conocer el desenlace, claro.
    ¡Un abrazo y felices fiestas!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Está claro que era una fiesta solo para dos, pero también que ellos mismos han introducido a un tercero en discordia, metiéndose solitos en la boca del lobo. No sé si en realidad querríamos conocer el desenlace con detalle, teniendo en cuenta que como poco van a saltar chispas, aunque pensándolo mejor, somos curiosos y nuestra naturaleza nos pide saberlo todo.
      Un abrazo, María Jesús, otro para Dani y feliz Navidad

      Eliminar
  20. Querido Ángel: nos relatas el amor clandestino, o casi, de una pareja que parece ser que la pasión les hace amarse sobre la cuerda floja. También denoto una crítica acertada a la violencia de género al definir tan bien y en tan pocas palabras al marido.
    En pocas palabras has contado mucho y eso, me gusta.
    Un fuerte abrazo, amigo mío. Y feliz Navidad, aunque espero tener la ocasión de volver a deseártela.
    Pablo

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Un trío de personajes, pero no precisamente amoroso, sino más bien pasional, capaces de llevar su deseo hasta la vehemencia, o también los celos hasta la violencia. Me alegro mucho de que te guste, Pablo, y más todavía que adelantes que nos felicitaremos la Navidad nuevamente, porque eso querrá decir que en breve tendremos el lujo de leer otro de tus relatos en Cincuenta Palabras, además del privilegio de comentarlo.
      Así que, feliz Navidad, amigo Pablo, y quedo encantado a la espera de poder leerte y felicitarte otra vez y todas las que procedan.
      Un abrazo fuerte

      Eliminar
  21. Tus amantes necesitan del riesgo para hacer sus encuentros más atractivos, pero no sé por qué me da que en esta ocasión, y dependiendo de un partido de fútbol, el éxito de culminarlo lo van a tener asegurado. Distinto es si lo hacen en el descanso delante de la puerta de la nevera donde guarda el marido las cervezas. Esa sí que sería la última vez. :) Un relato muy bueno y muy bien construido. Un beso, Ángel, y felicidades.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. No descartes que estos dos, no contentos con el considerable riesgo que ya asumen, se muevan por la casa para añadir todavía más emoción, parecen capaces de todo, y me temo que el marido también.
      Muchas gracias, Matrioska. Aprovecho para desearte feliz Navidad, al tiempo que te envío un abrazo

      Eliminar
  22. Geyna López16/12/15, 20:06

    Ángel, me quedo con unos nervios después de leerte. Muy bueni micro, como todos. Un abrazo y un beso.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Desde luego no es un relato para relajarse, más bien para terminar colmado de una cierta inquietud ante la suerte que pueden correr estos amantes. Lo bueno es que como se trata de ficción nunca llegará la sangre al río, y si sirve para pasar un ratito entretenido e intenso ya me doy por satisfecho.
      Otro abrazo para ti, Geyna. Y felices fiestas

      Eliminar
  23. Temerarios, desde luego que sí y no sé yo si esta será la última vez de estos amantes... Si te digo la verdad, no me gusta nada el marido y no quiero apuntar a nadie, pero creo que tiene mucha culpa de lo que se cuece a sus espaldas.
    Yo lo que quiero es que haya una conversación pacífica entre las partes y arreglen esto cuanto antes y de la mejor forma, ¿será posible?
    Te mando un beso fuerte, mi querido Ángel y te deseo todo lo mejor para estas fiestas navideñas y para 2.016.
    Malu.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. En Cincuenta Palabras se pueden contar unos hechos sin entrar en mucho detalle, pero es fácil intuir, como bien apuntas, que ese proceder tan pasional podría ser el fruto de un desahogo, como consecuencia de la actitud del marido, que se antoja un poco impresentable. Sea como fuere, me has convencido y, si me lo permites, apoyo tu tesis del diálogo. No tendrías precio como mediadora de paz enviada por la ONU.
      Yo también te deseo que pases unos días muy felices en compañía de los tuyos, que tienen la suerte de tenerte a diario. Feliz Navidad y brindemos por un nuevo año en el que no falten tus buenas letras.
      Abrazos

      Eliminar
  24. ¡Toma ya! ¿Detrás del sofá? Eso sí que es un buen chute de adrenalina en estado puro. Espero que ganara el equipo de fútbol de su impresentable marido, así podría desahogarse mejor con cada gol...
    Un abrazo, Ángel.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya sabes que a algunos les gusta vivir al límite de la osadía, por ejemplo, suben al Everest sin oxígeno, hacen "puenting" o practican la conducción temeraria, pero todo parece poca cosa frente a este colocarse detrás de un sofá, tendrían que calificarlo como deporte de alto riesgo.
      Gracias por tu comentario, Fernando. Un abrazo

      Eliminar
  25. Ese adverbio "aún" del inicio de la última frase me da a mí que no predice nada bueno. Espero, al menos, que haya prórroga y penaltis y que los amantes ganen el encuentro y la copa.
    Va mi me gusta, Ángel, y aprovecho la ocasión para desearte mis mejores deseos para estas ya próximas fiestas y para que en 2016 sigamos leyéndonos con mutua fruición.
    Un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Para qué te voy a engañar, el final queda abierto, aunque hay indicios claros de que la cosa puede terminar de forma un tanto agria, pero nunca se sabe; dejemos un resquicio para una prórroga. Me alegro de que te guste y yo también te deseo lo mejor para los días que se acercan. Si leernos es uno de tus propósitos para el nuevo año, lo comparto totalmente, aunque algunas de tus acertadas aportaciones también se pueden escuchar.
      Otro abrazo fuerte para ti y felices fiestas

      Eliminar
  26. Imagino ese momento, como una película, en un plano cenital. El marido cantando los goles y los amantes tras el sofá dedicados a lo suyo.
    Genial, Angel.
    Enhorabuena y felices fiestas.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. La interrelación suele ser buena entre las personas, aunque en este caso, la interrelación entre la pareja y el marido no parece muy aconsejable. Seguro que tú sabrías rodar la escena de la forma más adecuada.
      Muchas gracias, un abrazo y feliz Navidad, Asun

      Eliminar
  27. Fascinante imagen en movimiento de unos amantes temerarios que, por obra y gracia de una palabra -"aún"-, se transforma en una foto fija del momento previo a la tragedia.
    Relato líquido, podría decirse.
    Abrazos, Ángel.
    foto fija del momento previo a la tormenta

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya sabes que algunos textos pueden tener tantas interpretaciones como personas. Hay a quien le ha parecido que el relato podría tener un final abierto, algo perfectamente posible; otras personas, legítimamente, han expresado sus deseos de que todo termine bien pese a ese "aún". Tú has sido pragmático y has visto las muchas posibilidades de que se dé una situación más comprometida.
      Agradezco y valoro mucho tu comentario, Carles-Notinc, agudo, amable y versado. Te envío un abrazo y ya aprovecho para desearte felices fiestas.

      Eliminar
  28. Divertido y al mismo tiempo inquietante relato, Ángel. Hitchcock describía el suspense como un hombre descansando en un sofá bajo el que había una bomba a punto de explotar, dato este último que todos conocían salvo él. Y veo que tu historia supone una vuelta de tuerca a dicho planteamiento, pues el tipo y la bomba son el mismo elemento. Es evidente que la cosa no va a acabar bien, y creo que ese es uno de sus méritos, ya que al extremar el peligro de la situación logras ese momento álgido que muchas historias logran solamente tras una larga y desarrollada trama (es de suponer que estos escarceos comenzaron de manera parecida, pero con el marido viendo el partido en el estadio). Quiero decir con todo esto que me ha gustado mucho tu historia, y añadiría que observo en ella un interesante cambio de registro, al menos frente a lo que conozco de tu obra. Enhorabuena, amigo Ángel, y un fuerte abrazo.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Ya me gustaría acercarme, aunque fuese muy de lejos, a Hitchcock, saber crear, como él, algo nuevo, distinto y que perdurase, pero agradezco mucho tu amable y versado comentario. Tienes razón, ese hombre no necesita estar sentado sobre un explosivo para convertirse en una bomba de relojería viva que, curiosamente, han activado sus futuras víctimas. Al enviar este relato imaginaba que alguien podría comentar algo sobre un cambio de registro; también llevas razón aquí, aunque no es algo que haya buscado a propósito, sino que surgió, simplemente, quizá tocaba, como pienso que hay que tocar todos los palos para no anquilosarse.
      Es un placer leerte en toda circunstancia, amigo Enrique.
      Te mando un abrazo fuerte y mis mejores deseos para estas fiestas.

      Eliminar
  29. Utilizas las dos (sólo dos) palabras necesarias para dejarnos muy clarito que no habrá una proxima vez. Y nos cuentas la aventura final para retransmitirnos las tres últimas ligas. Nada fácil lo que haces, Ángel.
    Un abrazo con beso navideño.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Difícilmente habrá otra vez después de ésta, lo que no está tan claro es si esa pareja temeraria contaba con ello o pensaba que, de nuevo, podría eludir el peligro. Nada fácil es lo que tú haces, Margarita, al repartir la calidad de tus letras por todas partes, por lo que no es nada extraño que te sea justamente reconocida.
      Un abrazo navideño para ti también. Que disfrutes mucho estos días y los que tengan que venir después

      Eliminar
  30. Excelente Ángel, un relato que más bien es una microcrónica de una muerte anunciada (anda!, que buen título para un micro, jeje...).
    Un gran saludo y felices navidades.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Voy a confesarte que si no he utilizado en este caso ese título que apuntas ha sido porque no se me ocurrió a mí, tampoco lo haré a partir de ahora, porque esa variación de la novela de Gabo es una genialidad de tu autoría.
      Un saludo grande y felices fiestas

      Eliminar
  31. En tu historia juega con la probabilidad y todas las combinaciones posibles para que el marido (cornudo distraído) descubra la infidelidad. Esta pareja apuesta a desafiar la ley de Murphy. Ángel, otro micro muy bien contado.
    Saludos.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Esta pareja ha experimentado tantas veces la caída de la tostada por el lado favorable que se creen inmunes al infortunio, pero ya sabes aquello de "tanto va el cántaro a la fuente que al final se rompe".
      Muchas gracias por comentar, Beto. Saludos también para ti y que no paremos de leernos en 2016

      Eliminar
  32. Jajaja, Angel, en qué situación nos presentas a tus protas... y digo yo, si esa mujer se atreve a hacer tamaña osadía, ¿no será que tiene un marido un poco tonto? o es que el futbol no le deja ver más allá de sus naric... digo, detrás de su calva?
    Muy simpática la estampa.
    Un fuerte abrazo y que tengas un estupendo 2016.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Si alguien está tan ciego como para no ver lo evidente, si tiene tan abandonada a su mujer en beneficio de algo tan sobrevalorado como el fútbol, va a haber que pensar que anda un poco justo de luces, a lo que se une que encima es celoso y violento. En fin, que casi comprendemos a esa mujer, y eso que está cometiendo una clara locura.
      Muchas gracias, Rosy. Otro abrazo fuerte para ti y que tu 2016 sea de película

      Eliminar

Si no tienes cuenta, elige "Nombre/URL" en lugar de "Anónimo". ¡Gracias!