Perjuicio personal básico
La fuerza de las gotas mece el columpio, rebosan los hoyos que cavan los chiquillos al impulsarse. El color del agua embarrada me trae el recuerdo del cortado que pedía Arturo. Llovía el día que desanudaron su cuerpo del quitamiedos, llueve desde que me quedé huérfana de alma y sangre.
Sobrecogedor!!!! No es fácil que escampe cuando ruge la tormenta de la ausencia, cuando el duelo todo lo cubre. Enhorabuena Belén. Un saludo.
ResponderEliminarMuchas gracias, qué bonito comentario. Abrazos.
EliminarHay tormentas que tardan en irse. El "suelo" tarda en secarse y a veces, cuando parece que lo ha hecho, llueve de nuevo.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu micro.
Gracias, María. Me alegra mucho que te guste.
EliminarQué bien has transmitido el color de la tristeza. Micro bien acabado. Redondo y triste.
ResponderEliminarUn abrazo, Aurora. Te agradezco tu visita y tu lectura.
EliminarDe nuevo sale tu genio a relucir. Consigues transmitir con poderosas imágenes los pensamientos que van saltando en la cabeza de tu protagonista, desde que ve el columpio, los hoyos embarrados, el cortado, hasta el desenlace final. Me parece un micro para coger apuntes y estudiarlo como modelo de cómo se debe escribir. Y de los que pellizcan el alma.
ResponderEliminarUn beso.
Pablo
No quisiera nunca pellizcarte el alma, Pablo Sólo un pellizquito en la mejila y muchos besos de agradecimiento por tu visita y tus comentarios.
EliminarTriste y sorpresivo para las almas encerradas en el olvido.
ResponderEliminarUn beso.
La lluvia que moja la ausencia, y los recuerdos que arropan el alma. Me ha encantado, Belén. Un abrazo.
ResponderEliminarLa lluvia de la tristeza, de la pérdida. El color del barro manchando el alma.
ResponderEliminarBelleza en tus palabras, Belén. Transmites las emociones de la protagonista. Las sentimos con ella.
Felicidades y besos.