Desamores

Siempre discutían. Por cualquier cosa. Un día y otro y otro. Cada vez la cosa iba a peor.

Pero en el fondo se querían.

Él no podía evitar ir detrás cuando ella se enfadaba y decirle:

—Sabes que te quiero.

Y ella siempre volvía. Hasta el día que no volvió.
Escrito por Sara

1 comentario :

  1. Pasan cosas como éstas muchas veces, parece que es un hábito o un pálpito de la especie, de esos de los que no está nadie vacunado. Sara, has puesto el ojo en un situación y la has descrito en 50 palabras. Buen texto.

    ResponderEliminar

Si no tienes cuenta, elige "Nombre/URL" en lugar de "Anónimo". ¡Gracias!