Black is black
El público abarrota la sala donde presenta su libro. El escritor lee una tras otra sus negras historias, que son recibidas entre aplausos, exclamaciones de horror y las sonrisas de alivio que produce saber que todo es imaginación. Mientras firma dedicatorias el autor sonríe también, seleccionando a su próxima víctima.
Escrito por Manuel Menéndez Miranda
No hay mejor escritor que aquel que sabe de lo que escribe. Muy bien aderezado este juego de ficción y realidad, miedos y disimulos, con esa mezcla de sonrisas, unas de alivio y otras perversas, dignas del Marqués de Sade. Un tono de lograda de inquietud, sutil y genial, para un relato que, por fortuna, no es autobiográfico, una muestra de la creatividad y el buen humor, negro y elegante de su autor.
ResponderEliminarUn abrazo fuerte, Manuel
Te falta poner en tu libro: «Basado en hechos reales». Excelente micro que,además, me hará levantar la mirada cada vez que escuche un ruido mientras esté leyendo tu «Black is Black».
ResponderEliminarAbrazo, bro.
Estoy de acuerdo con Ángel, tu relato no es autobiográfico. Todo es producto de tu imaginación, ¿no?
ResponderEliminarUn abrazo, Manuel.
Nos vemos en tu Black is Black de A Coruña .
Dicen que el autor cuando escribe se desnuda. Creo que es lo que le ha ocurrido a tu personaje, aunque intente encubrirlo con la literatura.
ResponderEliminarBuena sorpresa final.
Suerte y saludos.
No eres más negro porque no te pintas con carbón de la mina. Por cierto, me gusta mucho tu relato sobre el campeón de liga de 1937... ¡No es negro! O sí...
ResponderEliminarUn abrazo.
¿Lo has hecho para que vayamos con miedo a la presentación de tu libro? ¿Crees que ahora podremos leer tranquilamente, en silencio, soledad y con la luz de una lamparita en nuestras casas Black is Black?
ResponderEliminarEres muy negro... cuando quieres...
Un beso.
Malu.
El autor real, que presume de Black homicida, es un hombre inteligente, con gran sentido del humor y una ternura que a veces esconde. ¿No es cierto, Manuel? Al menos, no me has envenenado con la tinta de la dedicatoria, ni con el paso placentero de las páginas. Magnífico tu libro y este micro, donde le das una vuelta de tuerca. Un fuerte abrazo. O dos.
ResponderEliminar¡Qué suerte! Me perdí esta firma de libros.
ResponderEliminarUn saludo cordial, manuel
Me ha gustado tu relato no autobiográfico, Manuel. Muy bien construido y con final sorpresa acorde con el título. Se han dado casos de escritores que son los protagonistas reales de sus negras historias. Pero solo conocemos los que han sido descubiertos. Este podría muy bien ser el siguiente, aunque por el momento parece que su pericia le mantiene a salvo. Enhorabuena.
ResponderEliminarUn saludo.