Siete cadáveres enterrados en mi jardín (Cine III: Thriller)
Colocó siete fotografías.
—¿Reconoce alguno de estos niños, Teresa?
—Sí —dije avergonzada.
—¿Vio alguno muerto en su sótano?
—¡Ya lo he dicho! Yo mismo los enterré.
—¿Los mataste tú?
—No, fue mi hijo. Él... está enfermo. ¿Acaso lo han arrestado ya? ¿Puedo verlo? —supliqué.
—Teresa..., usted no tiene ningún hijo.
Escrito por Raquel Tevas Cisneros
—¿Reconoce alguno de estos niños, Teresa?
—Sí —dije avergonzada.
—¿Vio alguno muerto en su sótano?
—¡Ya lo he dicho! Yo mismo los enterré.
—¿Los mataste tú?
—No, fue mi hijo. Él... está enfermo. ¿Acaso lo han arrestado ya? ¿Puedo verlo? —supliqué.
—Teresa..., usted no tiene ningún hijo.
Uff, esta película no necesita palomitas. Muy buena, Raquel.
ResponderEliminarOhh, muchas gracias guapa.
EliminarHola, Raquel.
ResponderEliminarMe parece un relato de mucho suspense, que me hace recordar a Psicosis, pero del revés: en esta ocasión hay una madre y un fantasmal hijo.
Un beso.
Pablo.
Sí, gracias Pablo por ver la referencia a ese hito del cine de suspense que es Psicosis, es el mejor halago que me podías hacer. En realidad quería hacer la típica escena de interrogatorio policial que me "chiflan", por la tensión. Y si supongo que esta Teresa no ha podido tener hijos, o abortos traumaticos... y eso le hace matar niños por un lado y desarrollar una doble personalidad, de ese hijo fallido que anhela tan patologicamente.
EliminarUn saludo muy afectuoso,
No sé si esta escena se ha llegado a rodar alguna vez, pero tiene toda la pinta de un clásico. Me choca el tuteo del quinto renglón. ¿Otro interlocutor? ¿Acaso ella misma, pero con otra personalidad?
ResponderEliminarEnhorabuena, Raquel.
Un abrazo.
La verdad es que no era mi intención, pero sería una pasada Enrique. Era en un principio un cambio de ritmo como gritándole ¡¿los mataste tuu?! Pero como no quería abusar de las exclamaciones, es más bien un tuteo poli bueno (poli malo), como para ganarse la confianza del interrogado.
EliminarUn saludo Enrique,
Como todo buen thriller, este relato nos lanza en búsqueda de la verdad a través de pistas ambiguas, provocando que nuestra curiosidad dé muchas vueltas en nuestro interior. ¿Es Teresa una asesina con personalidad múltiple o alguien más le ha tendido una trampa?
ResponderEliminarQué buena serie, Raquel.
Abrazo.
Vicente
Gracias Vicente.
EliminarOtro abrazo para ti.
Raquel, hoy nos traes a una asesina de niños con una mente enferma que culpa de ello a un hijo imaginario.
ResponderEliminarLo mejor es la forma directa en que nos lo has contado, a modo de interrogatorio policial. Un clásico en las pelis de suspense.
Me ha gustado el toque cinematográfico.
Besos.
Que bien que te haya gustado Pilar.
EliminarUn abrazo,
Qué bien contada la historia y qué bien elegido el formato de diálogo para llevarnos a esa magnífica frase final por la que se desborda todo el peso del desenlace. El tono policiaco es muy bueno, al igual que el retrato psicológico de la asesina.
ResponderEliminarMenudo nivelón el de tu serie, Raquel. Espero que no sea una trilogía.
Un saludo y mil enhorabuenas.
¡Vaya Gracias Antonio! La saga son seis micros (Terror, Western, Thriller, Road Movie, Aventura y Bélico). Pero no sé, si los siguientes estarán a la altura de tus expectativas. Espero que al menos, te gusten.
EliminarUn abrazo,
Una psicópata en toda regla y con una doble personalidad.
ResponderEliminarRaquel has contado en 50 palabras una verdadera película de suspense.
Buen relato Raquel.
Besos.
Gracias Javier
EliminarOtra beso para ti.
Muy efectivo ese diálogo en formato interrogatorio en el que con pocas frases desvelas toda una historia de crímenes y locura. Muy bueno, Raquel. Estoy deseando leer los siguientes. Un beso.
ResponderEliminarGracias Matrioska. Me encantan utilizar diálogos, pero con 50 palabras se complica un poco. Aun así, siempre que puedo meto alguno.
EliminarUn abrazo,
Siete crímenes cometidos y resueltos en cincuenta palabras. Buen trabajo, inspectora Tevas.
ResponderEliminarSaludos cordiales.
Inspectora Tevas XD jajaja Me encanta. Gracias Carles, la verdad es que se os quiere comunidad cincuentista. Os voy leyendo y comentando, y todos, sobretodo los más veteranos tenéis un trocito de mi corazón. Un mes sin vosotros se me haría muy raro.
EliminarUn saludo
La labor del investigador es juntar piezas hasta que todo encaje en un puzzle correcto. El interrogatorio cara a cara es un elemento fundamental en esta tarea, interesante por sí mismo, con el que has conformado una escena muy cinematográfica que ha servido bien para desvelar el final, con una información que tiene la autoridad pero no el lector hasta ese momento. Un relato con buenos ingredientes, un eslabón para una cadena que debe seguir creciendo.
ResponderEliminarSaludos, Raquel
Gracias Ángel comentar.
EliminarUn abrazo,
Tu protagonista es toda una asesina en serie. Es como la película Psicosis pero al revés. Un buen diálogo entre el investigador/a y la asesina. Me ha gustado. Un beso.
ResponderEliminarOtro beso para ti Olga,
EliminarUn thriller en toda regla Raquel. Bien puede ser el comienzo de una serie policíaca, tiene todos los ingredientes para rodas unos cuantos capítulos e ir investigando uno por uno esos siete crímenes.
ResponderEliminarBeso fuerte Raquel.
Malu.
Otro beso fuerte para ti querida Malu.
EliminarExcelente interrogatorio con tensión y sorpresa final para el lector. Da para mucho esta escena. Lástima que no tengamos más de 50 palabras. Espero con ilusión las siguientes "pelis".
ResponderEliminarUn beso, Raquel.
Gracias Carmen.
EliminarUn saludo,
Espléndido relato para cerrar la trilogía, nos muestras un thriller psicológico donde nos das pie a flashbacks terroríficos hasta llegar al desenlace. Un abrazo, Raquel.
ResponderEliminarMuchas gracias Salvador. No es una trilogía es una mini saga, aún faltan tres géneros cinematográficos más.
EliminarUn abrazo,
¡¡Espléndido cincuenta de intriga y suspense!! ¡¡Vaya tres relatos que llevas (hasta el momento)!!
ResponderEliminarMuy bien elegido el formato del diálogo, con una frase inicial que ya nos marca la intriga desde el mometo en que el número siete de las fotografías coincide, en una similitud macabra, con el número siete de los cadáveres enterrados (aquí el título cobra una especial relevancia).
Van mi me gusta, aún con los pelos como escarpias, y mi enhorabuena por tu saga, Raquel. Ya nos dejas con ganas de leer los que siguen...
Un beso.