Alien-Nación (La ciudad sin alma III)

Día 527.

Alienados, se aferraban a sus pequeñas rutinas como si las tinieblas no se hubieran apoderado de todo. Portaban velas. Iban y venían de sus trabajos inexistentes, zombificados. Escuálidos, chocaban contra paredes. Muchos morían atropellados por aquellos intrépidos, que incluso se atrevían a conducir en la más inhóspita oscuridad.
Escrito por Raquel Tevas Cisneros
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7 comentarios :

  1. Nuevamente, a esperar a la próxima entrega de tu relato.
    Me siento desplazado al Londres decimonónico, donde se compraban las obras de Dickens por fascículos.
    Muchas gracias, Raquel.

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    1. Muchas gracias a ti por comentar y leerme Manuel. La verdad es que lo de los cuentos por fascículos tienen su encanto.
      Un abrazo

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  2. Pilar Garrido Aláez9/11/18, 16:16

    En un futuro incierto...una sociedad destruida, quizá la humanidad se extingue.
    Me llena de incertidumbre el hecho de pensar que la Tierra se pueda llegar a convertir en un lugar imposible de habitar y donde sobrevivir.
    Un relato muy visual y futurista.
    Un cordial saludo, Raquel.

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    1. Pues a mi no me cuesta casi nada imaginármelo Jajaja ...
      Otro saludo para ti Pilar.

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  3. Poderosas imágenes en esta tercera parte, Raquel, con esa procesión de seres mecanizados portando velas tan inútiles como su porvenir.
    Felicidades.
    Un abrazo.

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  4. Gracias Antonio. Otro abrazo para ti.

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  5. Similar al estudio realizado con ardillas a las que se les privó de la luz solar durante días. Sus rutinas al principio eran constantes pero después variaron hasta alcanzan un verdadero caos. Estrés, desorientación y el afloramiento de enfermedades como el cáncer asociadas a alteraciones drásticas de los ciclos circadianos. No hay que olvidarnos de la depresión y los transtornos de violencia. Excelente relato para reflexionar.

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