Poncio, el Magnánimo

—No veo rey, sino hombre. El nazareno, pues, queda libre.

Las palabras del gobernador fueron latigazos en su espíritu. Sintió pánico.

Las preguntas se agolpaban en su mente, y miró al cielo buscando amparo.

Su destino era el sacrificio, la muerte. Su padre no le había preparado para la vida.
Escrito por Salvador Esteve

7 comentarios :

  1. El odiado Pilatos, en una nueva lectura, resulta tan misericordioso y sensato que recibe el apelativo de "magnánimo", un giro de ciento ochenta grados que cambia la visión del mundo tal como lo conocemos. No sabemos si detrás de esta decisión, tan positiva en apariencia, latía el deseo de poner a prueba, en la vida diaria, con todos sus avatares, nada menos que al enviado, al esperado, al Mesías, al Hijo de Dios, a quien tenía que venir.
    Las expectativas frustradas son una de las peores pruebas a las que la vida somete a los hombres, tanto más cuando todo parece estar escrito y se viene abajo, algo muy duro, incluso para quien está emparentado con la divinidad.
    Un relato muy original, una visión diferente, un reescribir la historia sagrada desde el respeto. Una simple decisión que cambiará la vida y creencias de la Humanidad.
    Siento no poder leerte más por aquí, pero sé que lo haré en otros foros.
    Un abrazo, Salvador

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  2. Un temblor divino sacude las Sagradas Escrituras con la decisión de Pilatos. La historia será otra muy diferente partiendo de la base que el Hijo de Dios, será, Jesús, el hijo del carpintero, el vecino de enfrente que tendrá, a partir de ahora, y como todo mortal, enfrentarse a la cruz del día a día.
    Un cierre excepcional a tus magníficas colaboraciones en esta página, Salvador.
    He disfrutado mucho de tus relatos y de tus ambles comentarios hacia los míos, que han supuesto un estímulo añadido para seguir participando mes a mes. Seguramente, volveremos a encontrarnos entre letras y palabras. Hasta entonces, suerte y un fuerte abrazo, Salvador.

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  3. Ángel y Manuel, muchísimas gracias por vuestros comentarios, siempre certeros, siempre motivadores. Palabras que aportan matices que ensanchan y ramifican la visión del relato. Echaré de menos vuestros micros y análisis, y también disfrutar cada día de las historias de los compañeros. Sin duda, nuestros caminos se cruzarán y seguiré aprendiendo y deleitándome de vuestros textos. Un fortísimo abrazo.

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  4. Salvador, leyendo tu micro me aferro más a la idea del destino. Hasta el propio Cristo, aún sin ninguna prueba, se vio destinado al martirio reservado a los malhechores.
    Me ha gustado, como me han gustado todas tus propuestas a la página durante este tiempo.
    Saludos afectuosos.

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  5. Muchas gracias, María Jesús, la satisfacción como lectores ha sido mutua. Nos seguimos leyendo. Un abrazo.

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  6. A mí también me pasa, a veces me sorprendo mirando al cielo y preguntando por qué la religión junto a la que me he criado se centra más en la muerte y el sacrificio que en la vida.
    Ha sido un gustazo compartir contigo relatos y comentarios, Salvador. Tener tu escritura cerca ha sido muy estimulante. Espero no echarte de menos y que nos encontremos por ahí.
    Un fuerte abrazo.

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  7. La gozada ha sido mía, Antonio, tus textos me encantan, y tienes en mí un lector entregado a tu prosa y poesía. Espero que nos sigamos leyendo. Un fuerte abrazo de vuelta.

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